Publicado: 03/12/2025 09:00 PM

(Últimas Noticias y El Nacional, 29 de noviembre 1960)

• Ante las manifestaciones estudiantiles ocurridas en Caracas el 28 de noviembre de 1960, convocadas en solidaridad con la huelga de los trabajadores de la empresa telefónica CANTV, el presidente Rómulo Betancourt suspendió las Garantías Constitucionales y ordenó al brazo armado del gobierno: “Disparar contra los saqueadores e incendiarios que se resistan”.

• La medida gubernamental, dictada a rajatabla contra estudiantes menores de edad, población civil y obreros que salieron a manifestar pacíficamente en la calle, dejó como saldo la muerte de:

  • Wilfredo José Carrillo, niño de 13 años de edad, quien falleció a consecuencia de un disparo efectuado por un funcionario de la Policía de Petare, fuera de su jurisdicción,en unacalledel Barrio Marín, en San Agustín.

  • Guillermina Echenique Padilla, de 16 años, cayó fulminada de un balazo en el abdomen propinado por un agente de la Policía del Distrito Federal. El hecho ocurrió en Los Flores de Catia.

  • Según el reporte del jefe de la Policía de Petare, fueron muertos por la acción de este cuerpo:

    • Alberto Guía

    • Rosario Mujica

    • Santos Inocente Belisario

    • Hubo un fallecido no identificado

• Esa noche fue alcanzada por un disparo de fusil la Dra. Natalia Chinaglia Silva. La víctima se desplazaba en un automóvil en las inmediaciones de El Valle cuando un efectivo del Ejercito disparo contra el vehículo al no atender la voz de alto.

• En la esquina de Cruz Verde, cerca del Liceo Andrés Bello, fue asesinado el joven estudiante Antonio José Mogollón, de 16 años, por un tiro efectuado por agentes la Guardia Nacional (GN).

• Todo esto ocurriócuando elrecién electo mandatario aún no había cumplido un año en el poder. Todos los partidos apoyaban su gestión, incluyendo al Partido Comunista de Venezuela (PCV) y ningún pronunciamiento o insurrección había estallado en su contra.

• Pocos meses después, el 13 de febrero de 1961, en ocasión de su 1er año de mandato, durante un discurso pronunciado en El Silencio, con la atiplada voz que le caracterizaba, ordenó a todos los cuerpos de Seguridad del Estado: “Disparen primero… averigüen después”.

REDACCIÓN MAZO