Publicado: 09/04/2025 08:00 PM

(Tribuna Popular y CLARÍN, jueves 5 de abril de 1962)

• El miércoles 4 de abril de 1962, saliendo de clases del Liceo Agustín Aveledo, cruce de las calles El Carmen y Gato Negro, fue asesinado por bandas armadas de AD, el niño Álvaro Ruiz González.
• Eran las 5:20 pm cuando Álvaro Ruiz, con sus útiles escolares en la mano, salió con su hermano menor y un grupo de compañeros de estudios.
• A las puertas del liceo, fue objeto de un disparo en la frente que le destrozó el rostro, cayendo de bruces en el piso.
• Este brutal infanticidio, fue causado, cobardemente, por miembros de una banda gubernamental armada dirigida por el cabillero Rubén Charlita Muñoz, quien, en forma inesperada, a la hora de salida de clases, desató una balacera contra los estudiantes del Liceo Agustín Aveledo.
• Ana Luisa Thomas, enfermera que se encontraba en el lugar de los hechos, declaró que, cuando se acercó al cuerpo ensangrentado del niño que estaba tendido en el suelo, logró ver al homicida, quien la amenazó de muerte para que no se aproximara. Como no desistió en su intento de prestar auxilio, el asesino hizo un segundo disparo hacia ella, que afortunadamente no acertó.
• Posteriormente, esta heroica mujer, profesional de la enfermería, hizo ante los medios de comunicación una narración exacta y pormenorizada del asalto armado ocurrido contra los niños y un retrato hablado muy detallado del infanticida.
• Los médicos y enfermeras del hospital donde el niño fue ingresado, entregaron directamente el cuerpo a la desesperada madre, Eduvigis González de Ruiz, para evitar que fuese robado por agentes de la Digepol.
• Con el propósito de impedir el velatorio, agentes de este cuerpo de seguridad del Estado allanaron los patios y alrededores de la humilde vivienda donde se reunieron sus compañeros de clase, vecinos y familiares.
• Sin embargo, era tal la multitud que lograron romper el acordonamiento policial. Pero a medida que avanzaba el cortejo fúnebre, fueron emboscados sorpresivamente por un contingente de la policía que disparó a diestra y siniestra para disolver a la gente que marchaba pacíficamente. Esto ocurrió frente a la Escuela Normal Miguel Antonio Caro.
• Álvaro Ruiz era hijo del vendedor de mercancías ambulante Nicasio Ruiz y Eduvigis González, estudiaba sexto grado y estaba adscrito al curso H.
• Su familia estaba domiciliada en una en el callejón X de Vista al Mar, en Los Magallanes de Catia, la cual fue allanada en un intento por secuestrar el féretro e impedir el apoyo popular que se hizo presente para protestar enérgicamente contra esta práctica reiterada del gobierno adeco.
• Corría el tercer año de gobierno de Rómulo Betancourt (1959-1964), durante el cual el asalto armado de bandas acompañadas de agentes de la policía, contra niños y jóvenes estudiantes, fue una práctica frecuente. Amén de secuestrar el cadáver de sus víctimas, para causar terror y disminuir la frecuencia de las protestas estudiantiles en todo el país.
• En Caracas, en ese primer cuatrimestre de 1962, bajo la salvaje modalidad de asalto en manadas, conjuntamente con uniformados policiales, las bandas armadas de AD cegaron la vida de: Luis Aquiles Bellorín Morgado, Omar Ramones Prieto, Leopoldo Salazar Romero, Ana Lourdes Pacheco, Aníbal José Jiménez, Simón Hortaja, Isaac Luigi, Cástor Carballo, Justo Camacho, José Ortiz, Simón Rafael Cahualga, Carlota de Ochoa, Pablo Guillermo Rodríguez, José Gustavo Quiroz, Rey Miguel Arvieca, Francisco Osorio Magallanes, Isaac Rafael Velásquez Luy, Martín Palacios Elías David la Rosa y Ramón Augusto Guevara Solórzano.

REDACCIÓN MAZO