EL GRAL. ISAÍAS MEDINA ANGARITA ENFRENTA LA AGRESIÓN IMPERIAL DEL TERCER REICH
Publicado: 03/09/2025 09:00 PM
SUBMARINOS NAZIS EN COSTAS VENEZOLANAS
(Últimas Noticias, enero-marzo 1942 y Élite, julio 1936)
• El 16 de febrero de 1942, el submarino alemán U-502 invadió nuestras aguas jurisdiccionales como parte de la Operación Neuland, hundiendo el tanquero Monagas en las afueras de la Península de Paraguaná con un saldo de 28 marinos venezolanos muertos.
• Otros tres submarinos, el U-156, U-67 y U-161, torpedearon y hundieron los tanqueros Pedernales, Arkansas, San Nicolás, Rafaela, Tía Juana y San Rafael, con la finalidad de cortar el suministro de 3.750.000 barriles de crudo que mensualmente se despachaban desde el Lago de Maracaibo a las refinerías de Aruba y Curazao, amén de saquear combustible para sus sumergibles.
• Dos días después, el Gral. Isaías Medina Angarita, el 18 de febrero en alocución presidencial, hizo un enérgico llamado a la unidad nacional ante las fuerzas presentes en nuestras costas del eje nazi fascista, en los siguientes términos:
“¡Venezolanos!
La sombra de la tiranía ha profanado las aguas sagradas de nuestra Patria. En la madrugada del 16 de febrero, buques mercantes que surcaban el Golfo de Venezuela en paz, llevando el petróleo que alimenta la libertad del mundo, fueron torpedeados por submarinos del Tercer Reich.
El Monagas, insignia de nuestra bandera, yace en las profundidades junto a sus hermanos el Tía Juana y San Nicolás. Veintiocho hijos de esta tierra perecieron en las olas, y decenas de almas valientes luchan por sobrevivir.
¡Compatriotas!
No es solo el acero alemán el que hiere nuestra dignidad: es un ataque cobarde contra la neutralidad que juramos custodiar. Venezuela, fiel a su tradición de paz, rompió relaciones con las potencias del Eje en diciembre de 1941, mas este acto de barbarie revela el desprecio nazi por la soberanía de los pueblos libres. Los torpedos que hundieron al Monagas buscaban estrangular el flujo vital de petróleo que desde el Lago de Maracaibo sostiene la lucha de las naciones aliadas por la democracia. El 64% del combustible que alimenta los aviones de la Real Fuerza Aérea Británica nace en nuestras refinerías de Aruba y Curazao. Hoy, esa sangre petrolera se mezcla con la de nuestros marinos.
¡Hermanos de América y el mundo! En esta hora oscura, no claudicaremos al miedo. Como Presidente Constitucional, he ordenado:
1. Refuerzo de la defensa nacional. Bajo la Ley de Préstamo y Arriendo, cuatro patrulleras equipadas con sonares llegarán para custodiar nuestras costas. El cañonero General Urdaneta, testigo del horror, será modernizado para cazar a los lobos nazis que acechan el Caribe.
2.- Unidad contra el enemigo interno. Se han confiscado los bienes de ciudadanos alemanes vinculados al Partido Nazi. Ochocientos cómplices están detenidos; el Colegio Alemán de Caracas, nido de propaganda fascista, ha sido clausurado.
3.- Solidaridad para con las víctimas.
El heroico Teniente de Navío Wolfgang Larrazábal y sus hombres rescatarán a todo sobreviviente.
Los caídos recibirán honores de la Patria. ¡Pueblo de Bolívar!
Invoco el espíritu de nuestros libertadores: Miranda, que llamó a extranjeros a defender estas tierras; Bolívar, que fundó la República con el sudor del pueblo. Hoy, como ayer, Venezuela no está sola.
¡Juramos!
Mientras el sol ilumine el Orinoco y el Ávila, Venezuela no será cómplice de la tiranía. Si la guerra llega a nuestras puertas, transformaremos el crudo en coraje. Declaro ante el mundo: ¡Cada gota de petróleo venezolano será un latido de esperanza para la humanidad! Con fe en Dios y en el destino de la Patria,
Gral. Isaías Medina Angarita. Presidente de los Estados Unidos de Venezuela”.
• No era la primera vez en nuestra historia que un presidente valiente decidía poner fin a una agresión armada en nuestras costas. En su oportunidad, para detener la acelerada incursión de submarinos y agentes nazifascistas en varias ciudades del país, el Gral. Medina los expulsó desarticulando todo el aparato de propaganda que operaba contra Venezuela dirigido por Joseph Goebbles, deteniendo la continua difusión radial de panfletos y discursos henchidos de los delirios de grandeza de Adolf Hitler y Benito Mussolini.
• Ambos precursores de otros endiosados tiburones de la guerra que hoy también merodean las costas de nuestra soberanía: Donald Trump, Marco Rubio y María Corina Machado.
• Medina, en su momento, no dudó en encarcelar y deportar a 800 agentes alemanes e italianos que recibían subsidios del Partido Nazi Alemán, a través de varias empresas, clubes, colegios y radiodifusoras instaladas en varias ciudades.
• Estos agentes eran los encargados de la propaganda de guerra y la emisión de noticieros y boletines de prensa que hacían mención a la superioridad aria y el odio racial; toda una declaración de intenciones para justificar una invasión a Venezuela y apoderarse del suministro petrolero.
• Entre los beneficiarios del gobierno alemán figuraban los comités nazis de Ciudad Bolívar, Valencia y Maracaibo; El Royal Club, La Sociedad de Auxilios Alemanes, el periódico fascista italiano La Patria, El Colegio Alemán, la Casa Domcke y la Casa Parda.
• El oficial de la embajada alemana y apoderado de la empresa Bayer en Caracas, Arnorld Margerie, era el jefe del Partido Nazi de Venezuela. Sus actividades eran dirigidas y financiadas desde Berlín por encargada de América Latina, Frau Edith Faupel.
• El Partido Nazi de Venezuela tuvo 200 militantes inscritos, una amplia lista de empresarios que sufragaban sus gastos y una nómina de más de 800 agentes que operaron en Caracas, Ciudad Bolívar, La Colonia Tovar, San Cristóbal, Maracaibo, Maracay, Los Teques, Coro, Puerto Cabello, Punto Fijo y Caripito.
• Para neutralizar esta agresión a nuestras costas el Gral. Medina Angarita dio estas órdenes:
• En Ciudad Bolívar fueron allanadas y clausuradas la Cervecería Angostura y la Casa Nazi. En ambos establecimientos fueron decomisados uniformes del ejército alemán, armas cortas de fuego, escudos y banderas del partido nazi.
• Se suspendieron, en el Teatro Olimpia, todos los noticieros de carácter antidemocrático que difundían propaganda nazi.
• Toda la legación diplomática italiana fue expulsada del país. Igualmente, expulsados el director de la revista La Patria, órgano del fascismo italiano en Caracas.
• Los directivos del diario El Faro, del edo. Lara, fueron citados para poner fin a la abierta campaña desplegada por ese medio informativo a favor del “Eje Nazi-Fascista”.
• En Los Teques, edo. Miranda, fueron clausuradas las cervecerías Austria y Gambinus, sus dueños fueron conminados a salir del país por distribuir propaganda fascista.
• Las actividades del Colegio Alemán fueron suspendidas, por cuanto a sus alumnos se les exigía vestir el uniforme de las juventudes hitlerianas, entonar los himnos del Partido Nazi y hacer el saludo a brazo alzado.
• De La Colonia Tovar, estado Aragua, fue expulsado el oficial nazi, Capitán Richard Aretz, organizador de grupos paramilitares.
• En Guatire, en el sitio denominado Campo Alegre fue cerrado el restaurante Don Pancho, cuyos propietarios distribuían folletos contentivos de los discursos de Hitler.
• En Caripito, edo. Monagas, fue confiscada una estación de radio clandestina dedicada al ejercicio propagandístico del Partido Nazi.
• En Caracas, fue cerrada La Casa Parda, centro de adoctrinamiento, recaudación de fondos y difusión de material de guerra. Su nombre alude a “los camisas pardas”, bandas armadas que llevaron a Hitler al poder, luego de cometer actos barbáricos, matanzas, saqueos y linchamientos de judíos, comunistas, homosexuales, gitanos y alemanes disidentes del totalitarismo nazi-fascista.
• En la revista Élite, edición del 18 de julio de 1936, grupos fascistas radicados en Venezuela hicieron pública su adhesión al genocidio practicado por las tropas de Mussolini en Adís Abeba, Etiopía, donde fueron masacradas 2.000 personas, entre ellas 452 monjes coptos que se oponían a la presencia militar italiana.
• Durante otra “invasión civilizatoria italiana” a Libia (1929-1934), 125.000 nativos fueron asesinados por autoridades coloniales de la bota europea bajo el mandato del padre del fascismo mundial Benito Mussolini.
REDACCIÓN MAZO