ASESINADO EL NIÑO DE 3 AÑOS CÉSAR GARCÍA VILLARROEL POR PELOTÓN DE LA G.N.
Publicado: 24/09/2025 09:00 PM
(El Nacional y El Universal, 20 y 23 de septiembre 1993)
- El 19 de septiembre de 1993, hace 32 años, el niño de tres años, César García Villarroel, resultó asesinado de un disparo en la región intercostal efectuado por efectivos de la Guardia Nacional (G.N.), cuando regresaba de un parque de atracciones, junto a sus padres.
- En un día signado por las protestas estudiantiles y la represión policial, un pelotón de la GN disparó contra varias personas que se encontraban reunidas en la planta baja del Bloque 4 de Lomas de Urdaneta, donde vivía la familia García Villarroel.
- Los padres de la víctima, Julio García y Mercedes Villarroel, cargaron al fallecido menor. Mientras fueron encañonados por los guardias nacionales para impedir que corrieran en su auxilio y denunciaran el homicidio. Todo ello a las puertas del mencionado bloque.
- Ese sábado en la noche, a las 9:00 p.m., ese pelotón de la GN realizó un operativo en la zona, lo cual quedó registrado en el libro de novedades del módulo de la Policía Metropolitana (PM).
- El abogado de las víctimas, Tarek William Saab, Defensor de Derechos Humanos, negó la versión oficial sobre un enfrentamiento entre agentes metropolitanos y la GN, además solicitó formalmente a las autoridades que el caso se ventilara ante la jurisdicción penal ordinaria, pues se trataba de un delito de homicidio calificado.
- Curiosamente, al efectuarse la audiencia para reconocer al homicida uniformado, a través de un espejo, éste no estuvo presente en la rueda de indiciados. Dicho guardia nacional fue uno de los que apuntó al padre con el niño muerto en brazos.
- Clara señal de encubrimiento por parte del gobierno accidental de Ramón J. Velázquez, quien sostuvo que “los tribunales militares iban a ser, incluso, más implacables que los propios tribunales ordinarios civiles”; cosa que nunca ocurrió.
- El gobierno accidental intentó, a todo evento, desviar el juicio a la jurisdicción militar para revestir de impunidad el infanticidio cometido por funcionarios que desplegaron la fuerza de las armas contra el Pueblo, siguiendo órdenes jerárquicas superiores.
- Eran los tiempos de la paranoia gubernamental que el defenestrado presidente Pérez instauró antes de su destitución.
- Ramón J. Velázquez asumió la presidencia accidental por ocho meses, siendo heredero de toda la barbarie represiva de su antecesor, Carlos Andrés Pérez. Represión policial instalada para arremeter contra los alzamientos y sacudones producidos por el Pueblo, en respaldo a los soldados del 4F, el 27N y el MBR-200.
- Velázquez no se apartó de esta práctica criminal, por lo que su gobierno fue protagonista de varios escándalos palaciegos y abusos policiales.
REDACCIÓN MAZO