Publicado: 15/01/2025 09:00 PM

(ÚLTIMAS NOTICIAS, 13 de enero 1962)

• El estudiante Alí Antonio Castrellón, de 13 años, quien cursaba estudios de quinto grado en una escuela de Lídice fue asesinado de un balazo a quemarropa disparado por un agente de la Policía Municipal de Caracas.
• El suceso se originó a la 1 de la tarde a las puertas del bloque 57 de Lídice, donde se encontraban jugando siete menores, entre ellos una niña de nombre Francis Reyes.
• Varios agentes llegaron en una patrulla. Los muchachos, al ver que se trataba de policías corrieron rápidamente a refugiarse en sus casas.
• Cuando el niño Castrellón buscaba la salida del callejón, salió un agente, quien sin darle voz de alto y sin tratar de detenerlo usó su arma de reglamento y disparó contra el menor a la altura del tórax.
• Los vecinos creyendo que el niño estaba aún vivo, lo trasladaron al Hospital de Emergencias de Salas, pero la muerte se había producido instantáneamente debido a que la bala, calibre 38, le destrozó el corazón.

CONTEXTO:

• El niño Alí Antonio Castrellón fue asesinado durante el cuarto año del gobierno de Rómulo Betancourt. Quinquenio en el que quedó asentada la doctrina de abrir fuego sin dar la voz de alto, sin intentar una detención previa y sin interrogar a las personas objeto de estas batidas policiales.
• Así, Betancourt gobernó violando la Constitución y las Leyes. Abolió de facto el principio jurídico de la Buena Fe, por lo tanto, cualquier persona era considerada como “sospechosa” y fuera de la Ley o blanco móvil de los cuerpos de represión policial.
• Argumentando su fobia paranoica anticomunista construyó su propio cementerio particular con más de 900 muertos en cinco años. Todo para garantizar que las empresas de Nelson Rockefeller y la burguesía criolla pudieran disfrutar de las jugosas ganancias de la renta petrolera.
• Su sucesor, Raúl Leoni, a quien el mismo Betancourt descalificaba al llamarlo “abúlico”, ejercería entre 1964-1969, un grado aún más alto de represión y exterminio. Durante su gobierno fueron torturados, fusilados y desaparecidos más de 3 mil venezolanos.

REDACCIÓN MAZO