Malaverismos: Simón Bolívar en la oposición
Publicado: 25/07/2021 06:00 AM
Preocupados porque no celebran ni conmemoran ninguna fecha
importante, los miembros caídos de la oposición discutieron el 24 de julio la
posible celebración del nacimiento de Simón Bolívar.
Eran las 11 y 17 de la mañana del sábado 24 de julio, cuando Ramos Allup prendió la
computadora que le trajo su cuñado de Miami. Mientras acariciaba a su perro
Chicharrón, esperaba que se normalizara la pantalla. Fue directo a su twitter
@hramosallup y vio que no tuiteaba desde el 22 de julio. Vio que la primera
tendencia era Simón Bolívar y un aletazo de recuerdo le vino a la mente.
-Carajo, hoy es el cumpleaños de este hombre que yo saqué de
Miraflores cuando fui presidente de la Asamblea Nacional.
Se metió en la tendencia Simón Bolívar y estuvo analizando
todos los twitter que aparecían allí. Eran homenajes por todas partes.
Resaltaba un discurso del presidente de México, López Obrador.
-Este como que quiere que lo invada Joe Biden –se dijo.
Siguió avanzando buscando algún tuiter de alguien de la
oposición, pero no encontró nada. Fue al twitter de Bernabé Gutiérrez y tampoco
encontró nada.
-Menos mal que este no se ha metido a bolivariano –se dijo.
Después de ver que nadie de los opositores había colocado
nada a favor de Simón Bolívar, decidió llamar a Edgard Zambrano para que les
enviara un mensaje a los demás miembros caídos de la oposición para hablar por
zoom, y que era urgente.
Edgard Zambrano llamó a los miembros caídos y al
momento, estaban todos metidos en la
pantalla.
Y Ramos Allup tomó la palabra.
- Amigos, los convoqué porque otra vez estamos quedando mal.
No dijimos nada hoy del nacimiento de Simón Bolívar, nos estamos olvidando de
los héroes de la patria, incluso de Rómulo Betancourt.
- No metas a Betancourt ahí que le ensucias el día al
libertador –le dijo Manuel Rosales.
- Está bien, Manolito, no te molestes. Yo sé que la
distancia entre tú y Rómulo es cada día más grande, pero no importa. Lo que
quiero decir es que la gente se va a dar cuenta de que nos importa un carajo la
historia de este país.
- Eso es verdad –dijo Ismael García.
- Hoy 24 de julio también nació Juan Vicente Gómez –dijo
desde Salamanca el poeta López.
- Y seguramente a ese es el que tú quieres celebrar y
homenajear. –le dijo Ramos Allup.
- Lo digo porque también podemos hacer una analogía entre
las dictaduras.- dijo el poeta López
- Eso no aguanta ninguna analogía, poeta, aquella sí era una
dictadura, esto es una fiesta, lo que pasa es que nosotros decimos lo que nos
da la gana, como por ejemplo, eso, de que es una dictadura.
- Pero podemos sacar un avisito –dijo Julio Borges.
Ramos Allup agachó la cabeza y vio que su perro Chicharrón
le estaba lamiendo el zapato derecho, entonces lo levantó y se lo puso en las
piernas, y dijo:
-Yo lo que creo es que entre los dólares que nos hemos
robado, y que la Usaid le está reclamando al interino, y entre las empresas
Citgo y Monómeros, no hemos tenido tiempo de pensar en los héroes de la
patria.- dijo Ramos Allup
Carlos Vecchio se reía mientras contaba una faja de billetes
de cien dólares. Manuel Rosales entraba y salía de la pantalla y cada vez que
entraba decía: “probando, probando”.
- No estamos pensando en el país, y la gente se está dando
cuenta- dijo Manuel Rosales.
- Sí, yo vi que te lanzaste como candidato a gobernador por
el Zulia, y la gente no te acompaña en
las marchas. Es verdad, la gente se está dando cuenta –dijo Julio Borges.
- Por favor, el tema hoy es Simón Bolívar. Y es para decir
que nosotros no lo tomamos en cuenta. No lo recordamos. –Reafirmó Ramos Allup
- Pero tú lo recordaste –dijo Ismael García.
- ¿Yo? –preguntó Ramos Allup con asombro.
- Claro. No te acuerdas cuando lo sacaste de la Asamblea
Nacional y después dijiste que el próximo en
salir era Maduro, y todavía estamos esperando. –le contestó Ismael
García.
- Mira Ismael, el Simón Bolívar que yo saqué de la Asamblea
no era Bolívar, era otro, un retrato.
Viendo que la cosa no caminaba y que tenía muchos negocios
que hacer en ese momento, Carlos Vecchio preguntó:
-¿Y que vamos a hacer? Que tengo mucho que hacer.
- Dejar de robar –dijo Ramos Allup- perdón, que se me salió
eso.
- Yo me voy –dijo Carlos Vecchio, y se retiró de la
pantalla.
En ese momento Chicharrón, el perro de Ramos Allup, comenzó
a ladrar, y desde la cocina la señora de Ramos preguntó:
- Mi motorcito, ¿qué le pasa a Chicharrón?
- Nada mi amor, que se fue Carlos Vecchio y Chicharrón lo está celebrando -.le contestó
Ramos Allup.
-¿Qué hacemos con Bolívar, entonces? –preguntó Edgard
Zambrano.
- No olvidarlo para la próxima –dijo Manuel Rosales- Sobre todo
ahora, que los chavistas están diciendo que tiene una espada que camina por
América Latina. ¿Se imaginan eso?
- Entonces estamos de acuerdo. – dijo Ramos Allup- Vamos a
estar más pendientes de las fechas patrias para que le gente vea que nosotros
también somos patriotas, lo que pasa es que no lo decimos para no coincidir con
los chavistas. ¿De acuerdo?
- De acuerdo –dijeron todos.
Y Ramos Allup apagó la computadora,
y viendo la foto de tamaño natural de Rómulo Betancourt que está en la sala que
lleva su nombre en la quinta La pipa de Guatire, dijo:
-Ay, Rómulo. Ay, Rómulo, este we will come back está cada día más lejos.
ROBERTO MALAVE