Publicado: 08/01/2025 09:00 PM

(ÚLTIMAS NOTICIAS, martes 4 de enero 1994)

• El 3 de enero de 1994, más de 100 reclusos perdieron la vida, a consecuencia de un incendio provocado y de los disparos de agentes de los cuerpos de seguridad cuando irrumpieron para reprimir la protesta de los privados de libertad, quienes exigían mejoras en las condiciones de vida dentro de la prisión de Sabaneta, edo. Zulia.
• Los hospitales de esa entidad regional, especialmente el Universitario del Zulia, colapsaron en medio de la cantidad de cadáveres, heridos de bala, quemados, asfixiados y ahogados.
• Los informes finales, sobre la llamada “Masacre de Año Nuevo”, determinaron que las fuerzas de seguridad entraron al recinto carcelario realizando ejecuciones extrajudiciales, homicidios arbitrarios y heridos de gravedad. El número de muertos se elevó a 150.
• La situación de violencia causada cuando funcionarios de la Guardia Nacional entraron al recinto carcelario nunca fue investigada.
• Mientras los familiares de los privados de libertad exigían información sobre las víctimas, las autoridades del penal, alegando falta de cámaras frigoríficas, enterraron decenas de cadáveres en fosas comunes del cementerio de Maracaibo.
• Esto impidió la realización de las experticias médico forenses, la identificación de los abaleados y determinación de las verdaderas causas de las muertes allí ocurridas.
• En medio del motín se produjo un incendio en los pabellones 1, 2 y 3, que dio pie a la intervención policial, con un saldo de decenas de muertos por asfixia.
• Lo ocurrido en la Cárcel Nacional del Zulia (Sabaneta), dejó una sombra de impunidad que pretendió ocultar las decenas de Ejecuciones Extralegales, Arbitrarias y Sumarias, perpetradas por funcionarios policiales, que nunca fueron llevados ante los tribunales de justicia.
• Esto ocurrió durante el gobierno interino de Ramón J. Velásquez, mientras era Fiscal General de la República Ramón Escobar Salóm, magistraturas opacadas por este y otros hechos criminales como el narco indulto de Larry Tovar Acuña y el desfalco bancario de ese mismo año, que permitió la fuga de los dueños de los principales bancos del país, con más de 6.000 millones de U$D, otorgados por FOGADE en concepto de auxilios financieros.

REDACCIÓN MAZO