Malaverismos: El discreto encanto de la burguesía el 13 de abril del 2002

Publicado: 14/04/2019 06:30 AM

Reunidos en la quinta La Pipa, de Henry Ramos Allup, los miembros de la oposición vieron los vídeos del 13 de abril para recordar el papel que hicieron ese día, y para ver cómo enmendaban ese error.

El sábado 13 de abril de 2019, la señora del servicio de la quinta La Pipa, atendía a los invitados que venían llegando a recordar cómo vivió la oposición el 13 de abril del 2002, después que dieron el golpe de estado al Presidente Hugo Chávez, y que ese día salieron despavoridos del palacio de Miraflores.

Después que hizo su entrada el diputado Edgar Zambrano, Henry Ramos Allup, dueño de la casa, le dijo a la señora que ya estaban todos los invitados, y la señora cerró la puerta de la quinta La Pipa. Una vez que todos tomaron asiento, Ramos Allup tomó la palabra:

-Compañeros, estamos aquí, porque es bueno recordar la metida de pata que hicimos el 11 de abril, metida de pata con la que yo nunca estuve de acuerdo, y por eso ustedes no me van a ver en ningún vídeo apoyando esa acción antidemocrática. Miraremos los vídeos y los iremos comentando. Es bueno reconocer nuestros errores y ver cómo podemos mejorar, aunque con lo que estamos haciendo en este momento, yo creo que es muy difícil mejorar.

Tomó el control remoto y lo apuntó a la pantalla gigante del televisor que se haba traído de la casa nacional de AD, y que había colocado en el salón Rómulo Betancourt, y dijo:

-Vamos a ver primero la carrera del año que pegaron unos cuantos en Miraflores cuando les dijeron que venìan aviones desde Maracay.

Vieron las imágenes donde aparecía Molina Tamayo viendo por detrás de una ventana, todo asustado, y después salió corriendo. Vieron a Pablo Medina subiendo a un carro y diciendo para donde iba. Vieron a Patricia Poleo corriendo desesperada. Y en ese momento Ramos Allup paró la imagen.

- Ese fue el espectáculo que dimos. En verdad que da pena y vergüenza. Y ahora nadie fue. Después de tantos años haciendo política, ahí hicimos el ridículo.

- Menos mal que nosotros no fuimos, mi presidente.- dijo Zambrano.

- Yo estuve a punto de ir, porque me llamó Pedro Carmona, y le dije que ni de vaina, que yo no era pendejo. Sigamos viendo.

Volvieron otras imágnes y se pudo a ver a Eduardo Fernández abrazando gente en Miraflores. Al padre Mikel De Viana diciendo que “todo el mundo sabe que yo soy adeco”. A Marcel Granier. A Carlos Ortega. A Américo Martìn.Y a muchos otros abrazándose y riéndose. Otra vez Ramos Allup detuvo las imágenes y dijo:

-Ese padre De Viana dijo que era adeco y nos echó esa vaina. Pero sigamos, que el ridículo es largo. Y los chavistas no olvidan.

Ahora se vieron las imágenes donde el abogado Daniel Romero, a punta de considerandos, acababa primero con el nombre de República Bolivariana y después destituyendo a todos los funcionarios que ocupaban altos cargos. Incluso, a los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia. Y luego vino la autoproclamación de Pedro Carmona y allí detuvo el vídeo Ramos Allup.

-Ya hemos visto dos autoproclamaciones, la de Carmona y la del diputado. Una peor que la otra. Y ninguna de las dos nos han servido para nada. Y miren este vídeo.

Ahora vieron a Enrique Mendoza montado sobre un vehículo gritando y llamando a Miraflores. Y se fueron por corte para ver a Julio Borges pidiendo la renuncia del presidente y de todos los que lo acompañaban. Y ahí Ramos Allup paró nuevamente el vídeo.

-La verdad que este ridículo nacional e internacional que hicimos es la verdadera naturaleza de muchos de nosotros. Eso de que somos demócratas ese día lo negamos por todo lo alto. La verdad se ve en pantalla, como dicen por allí.

Ahora Ramos Allup tomó asiento, y le hizo una señal chiquita a la señora para que sirviera unos tragos y unos pasapalos. Se levantó y se acercó a la armadura falsa que compró en Toledo, España, y aprovechó y le pasó el pañuelo para quitarle un sucio que tenía, y dijo:

-Y lo peor es que ahora los chavistas nos tienen clavados con eso de que todo 11 tiene su 13, y esa fracesita nos ha hecho el daño que jode. Y pensar que todos los abriles nuestro pueblo seguirá viendo estas imágenes por mucho tiempo, porque las imágenes abundan.

La señora pasó primero con la bandeja de los tragos y luego volvió a pasar con los tequeños, y viendo las caras de amargados que tenia el grupo de opositores que había asistido a la quinta La Pipa, les dijo:

-¿Y a ustedes todavía no se les ha caído la cara de vergüenza por seguir apoyando a esos golpistas?

Los asistentes se vieron las caras y nadie dijo nada, lo que quiere decir, que estaban de acuerdo en seguir apoyando a esos golpistas.

                                   

ROBERTO MALAVER