Accidentes y explosiones en EEUU 2023

Publicado: 24/03/2023 04:00 PM

Por qué tantos accidentes ferroviarios en Estados Unidos? ¿A qué se debe? ¿Qué es lo que está detrás de tantas explosiones? Hasta ahora, ninguna autoridad estadounidense ha dado una respuesta concreta para explicar estos eventos que han salido a la luz desde enero de 2023 y que tienen años sucediendo.

Lo que siempre se ha vendido al mundo, es que EEUU tiene una de las mejores capacidades industriales, las mejores organizaciones e infraestructuras cónsonas con el país más desarrollado del continente, sin embargo, las comunidades que viven cerca de plantas químicas están en constante zozobra, contrario a lo que vemos desde afuera y la frecuencia de situaciones que ponen en riegos a los ciudadanos ese país es "sorprendente", ya que ocurren cada dos días.

Más de una docena de accidentes ferroviarios han ocurrido en EEUU en lo que va del 2023. La Agencia de Estadísticas de Transporte estadounidense registra 54 mil 539 descarrilamientos de trenes entre 1990 y 2021, un promedio de 1704 siniestros por año.

De acuerdo a las declaraciones de Mathy Stanislaus, ex trabajador de la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) en una entrevista concedida al diario The Guardian, declaró que: "lo que sucedió en East Palestine, Ohio, es algo habitual en las comunidades que viven cerca de vias férreas y plantas químicas" agregando que éstas "viven con un temor perpetuo" a nuevos accidentes.

A esta afirmación se suma que la Coalición para Prevenir Desastres Químicos de EEUU, estima que anualmente ocurren 150 incidentes graves, tales como incendios originados por productos químicos, explosiones y emisiones tóxicas que ponen en riesgo la vida de millones de personas.

Según las autoridades, el descarrilamiento del tren de carga de la empresa  Norfolk Southern ocurrido en East Palestine, Ohio, fue provocado por el sobrecalentamiento de un cojinete, pieza que se utiliza para reducir el roce de la rueda con el eje.

A continuación, se presentan  los accidentes y explosiones que han ocurrido este año y que no han podido ocultarse ni explicarse:

El diario El País informó que el 12/01 ocurrió un incendio en la planta química “Carus Chemical” en la ciudad de La Salle, Illinois, que liberó al aire una sustancia de color verde; la cuál según las autoridades no era tóxica, sin embargo, recomendaron evitar tener contacto con la misma.

El portal de noticias Newsweek destacó tres accidentes en Carolina del Sur este año: el primero ocurrió el 09/01 cerca de Lake City con 20 vagones descarrilando después que el tren chocara contra un vagón vacío que había quedado en las vías. No se reportaron heridos.

El segundo  sucedió el 21 de enero cerca de Loris, Carolina del Sur que involucró a varios autos que transportaban piedras y grava y se volcaron. Tampoco hubo heridos. 

Mientras que el tercer incidente, sucedió cerca de la población de Enoree, Carolina del Sur, el lunes 23 con pocos detalles disponibles.

Entretanto, primero de febrero, el portal noticioso El Clarín reveló que un tren se salió de las vías en Detroit, Michigan, dejando varios autos colgados del costado de un puente. Otro incidente involucró a un tren de pasajeros en Filadelfia, Pensilvania, que resultó sin muertos ni heridos.

El diario New York Times el 03 de febrero comunicó que se descarriló un tren de la empresa Norfolk Southerm, con 150 vagones que contenían cloruro de vinilo, en la población de East Palestine, Ohio. 

Según la publicación, de los 50 vagones que quedaron destrozados a raíz del accidente, 10 trasladaban sustancias químicas tóxicas y materiales altamente inflamables, como el acrilato de butilo, acrilato de etilhexilo y éter monobutílic de etilenglicol. El impacto ambiental generado aún no está claro.

Hasta la fecha, existe el temor de que estas sustancias tóxicas todavía se encuentren en el río o en aguas superficiales, algo que ha sido descartado por la compañía de agua. Sin embargo, algunos residentes de la zona se han quejado de dolores de cabeza y otros malestares tras el descarrilamiento. Además, se reportó que aproximadamente 3 mil 500 peces pequeños murieron.

Pero la mayor preocupación se concentró en el cloruro de vinilo, un gas altamente tóxico que provoca problemas respiratorios, vómitos, y en una exposición prolongada, cáncer de hígado. Además el cloruro de vinilo causa varios tipos de cáncer: cerebro, pulmón, hígado, linfoma, leucemia. En el embarazo afecta el feto y respirar niveles altos puede causar la muerte; de esto fue la "liberación controlada" en Ohio, envenenaron a millones por no gastar un dólar en evacuarlo.

El gobierno de EEUU insiste a la población de Ohio: "No hay ningún peligro", y en consecuencia, no enviarán recursos federales para atender la emergencia. El presidente Biden al respecto escribió en su cuenta de Twitter: "Hoy, la Agencia de Protección Ambiental de Estados ordenó a la compañía de trenes Norfolk Southern pagar por la limpieza y eliminación de materiales peligrosos. Esto es sentido común. Este es su lío. Deberían limpiarlo”, según información publicada en el portal Europa Express.

Por otra parte, el 04 de marzo la represa construida para contener el agua contaminada por el derrame químico, causado por un descarrilamiento en East Palestine, Ohio, ha sido destruida por una lluvia torrencial, generando el derrame de tóxicos en las vías fluviales que llevan a la ciudad.

El portal La Opinión indicó que otro accidente ocurrió el 13 de febrero, en Houston, Texas, cuando se descarriló un tren con materiales peligrosos de la empresa Union Pacific. El conductor falleció tras el choque.

El 14 de febrero hubo un volcamiento de un camión con materiales peligrosos (ácido nítrico) en Tucson, Arizona, así lo informó el portal Telesur, al tiempo que detalló que los ciudadanos podrían pasar 12 horas refugiados y, según las últimas informaciones publicadas por las fuerzas, el camión transportaba 900 kilos del componente dañino y peligroso. El conductor murió en el acto.

El diario La Nación reseñó sobre un incendio que ocurrió el 15 de febrero, en un almacén de PVC en la ciudad de Kissimme, Florida. Este accidente consumió tres hectáreas de la empresa, lo más grave de este caso es que uno de los componentes para fabricar PVC es el cloruro de vinilo, la misma sustancia tóxica que tiene en apuros a los habitantes de Ohio.

Otro accidente de descarrilamiento fue el del tren de la empresa Norfolk Southerm, que ocurrió en Michigan, Detroit, el cual desató un derrame de material tóxico, de acuerdo al portal Democracy Now. Al respecto las autoridades locales informaron que uno de los vagones contenía cloro líquido, un producto químico altamente corrosivo y aseguran que no hubo heridos ni tampoco escapes de materiales contaminantes.

Por su parte el diario Sputnik News anunció que el 20 de febrero, hubo una explosión en un establecimiento industrial especializado en soldaduras en la región de Medley, Florida; dejando dos personas fallecidas y cinco heridas.

Paralelamente, el diario El Heraldo publicó que ese mismo día hubo otra explosión en una fábrica de metalurgia ubicada en Bedford, Ohio, en el que 13 personas resultaron heridas.

Por otra parte, el 21 de febrero se presentó otro incendio de dimensiones considerables en un almacén de madera en Brooklyn, llenando de humo parte de la ciudad de Nueva York, informó el portal de EVTV.

También el 21 de febrero, el medio RT notificó que se descarrilaron más de 30 vagones de un tren de la empresa Unión Pacific con una carga de carbón en el estado de Nebraska.

Asimismo, el diario La Nación reseñó que el 08 de marzo que hubo un descarrilamiento de un tren de carga en West Virginia, que además derramó combustible diésel en el rio New River. El tren de carga supuestamente golpeó un desprendimiento de rocas y se incendió.

Un tren cargado con materiales peligrosos se  salió de la vía cuando cruzaba el condado de Mohave, en el estado de Arizona el 15 de marzo. El portal Europa Press detalló que “ésta comunidad está principalmente constituida por indígenas agricultores que cultivan maíz, calabazas, melones, trigo, habas y otros cultivos locales”.

Estos sucesos son el resultado de medidas de seguridad menos estrictas y la reducción de personal, como parte de un esfuerzo por aumentar las ganancias de las compañías ferroviarias y de la mediana industria norteamericana.

AMELYREN BASABE / REDACCIÓN MAZO